El astrónomo moderno
Como una supervivencia de los almanaques populares de los siglos pasados, llenos de pronósticos, cálculos y predicciones astronómicas y meteorológicas, se publicarían a lo largo de la geografía española una serie de folletos, al servicio de las gentes sencillas y crédulas, más adelante mezclados con la boga de la pasión por la Lotería. Un ejemplo más entre tantos los hace patente El Astrónomo Moderno, publicación mezcla de cabalística y lotería, redactada por Juan Fenoll, de Elche, llamado “El Poderoso”, e impreso en Alicante en 1846.
Periodistas en la oficina de telégrafos. Siglo XIX
Después del correo y antes del teléfono, fue el telégrafo el medio más eficaz, por su rapidez, de que disponían los periodistas para transmitir sus informaciones. En días de alta cota de noticias los despachos de los telégrafos se veían asediados por los profesionales de la noticia para enviar sus despachos. He aquí la
escena de ese momento, reflejada en este dibujo, inspirado en un dibujo del pintor Tomás Muñoz Lucena y aparecida en el veterano semanario madrileño Blanco y Negro, a fines del siglo XIX. Cuadro inserto en el más puro perfil costumbrista, refleja con viva sencillez la motivación de un quehacer siempre escoltado por urgencias.
Semanarios ilustrados. Siglo XIX
Desde
El Artista, de Eugenio de Ochoa y Federico Madrazo, de 1835, hasta
La Ilustración Española y Americana, de Abelardo de Carlos, de 1869, pasando por el
Semanario Pintoresco Español, de Ramón de Mesonero Romanos, de 1836, discurre todo el proceso histórico y artístico del periodismo ilustrado español, con una gama tecnológica del arte gráfico, que va desde el grabado en boj al fotografiado, pasando por la litografía.
La exaltación de la imagen sobre el texto sembraría toda una teoría gráfica al servicio de una función informativa, precursora del periodismo visual de nuestros días.
Nilo María Fabra (1843 - 1903)
Hace ciento diez años, un periodista español, el gerundense Nilo María Fabra y Deas, creó la que sería la primera agencia de noticias de nuestro país. Esta llevaría su nombre, insertando tal empresa en la geografía inter-informativa de las grandes instituciones mundiales de su tiempo. Al lado de la
Havas, la
Reuter, la
Wolff, la
Stéfani, la
Associated Press y la
United Press,
la Agencia Fabra
representó un adelanto en la cobertura de la información periodística del extranjero en nuestra patria. Duró mas de un sexenio y
en su dilatado laborar usó desde las palomas mensajeras al teletipo, así como las hojas policopiadas, el telégrafo y el teléfono. Máquina autográfica
Este pequeño aparato fue el ingenio artesano con el cual el periodista Manuel María de Santa Ana sacaba varias copias confidenciales, enviadas a sus clientes; en ellas se recogían aquellas noticias que él obtenía de Ministerios, cafés, políticos, etc., como un exponente de inquietud reporteril.
Era una policopiadora rudimentaria, como rudimentario era el trabajo periodístico de su usuario. Aquellas noticias, manuscritas primero, y autógrafas más tarde, tituladas
Correspondencia Autógrafa, se convertirían años después, desde 1848, en el diario
La Correspondencia de España, que, tras disfrutar de gran popularidad, llegó hasta finales del primer cuarto del siglo actual.